Jesus Arturo Devesa Pardo

Como crear innovaciones y conseguir objetivos

No preste atención a la repentina revelación de una idea.

Enfocarse en los momentos mágicos es separarse del objetivo, el cual debe ser el resultado final de una útil innovación.

Una útil innovación conlleva largas secuencias de experimentación, de prueba y error, lo cual requiere años o décadas.

Lo que importa es la habilidad para ver un problema, problema claramente combinado con el talento para resolverlo.

Esta habilidad se conoce generalmente con el nombre de algo tan poco divertido como trabajo.

Método es la forma sistemática de conseguir algo.

Un verdadero experimento tiene al menos una variable y el experimento debe de estar enfocado en como la variable cambia.

Por experiencia sabemos que lo imposible nunca ocurre.

No hay manera de evitar riesgos cuando se hacen nuevas cosas.

Desarrollar una idea requiere recursos, sin garantía de que la inversión de beneficios.
 

Innovar conlleva experimentar más fracasos que éxitos.

La fe puede inspirar a superar temores.

No confundir inspiración con ejecución.

Apasionamiento y confianza son combustible para trabajar, pero no garantizan el éxito.

La imaginación es la que crea la riqueza, no el conocimiento.

Los fracasos con ideas fallidas no son por falta de conocimiento sino por la incapacidad de invertir las horas suficientes.

Hay una gran diferencia entre saber hacer algo y realmente ser capaz de hacerlo. Esa diferencia está en las horas de dedicación.

Esas horas de dedicación requieren coraje, persistencia, sentirse a gusto con el riesgo y la voluntad de trabajar sin garantía de recompensa.

Leer teoría es algo pasivo y seguro, pero iniciar un proyecto es algo activo e inseguro.

Los expertos en algo saben, escriben y hablan sobre algo pero nunca crean algo.

Solo tratando de hacer algo que resuelva problemas a los demás se puede manifestar el potencial real que uno tiene.

Malcom Gladwell popularizó la idea de que se necesitan 10.000 horas de práctica para ser bueno en algo.

La creatividad no es algo abstracto, es algo específico.

La creatividad surge cuando se trata de hacer algo.

Soñar da la comodidad y la recompensa que no da la realidad.

Hay una gran distancia entre saber y hacer, entre conocimiento y creación.

Sin riesgo no hay innovación.

La innovación y el progreso se crean a partir de fracasos.

Una idea es algo abstracto, lo que no es abstracto es apostar tu reputación, tu carrera profesional y tu dinero en esa idea.

La convicción, la confianza y la voluntad para asumir riesgos es algo excepcionalmente raro. Debido a esto la mayoría de las innovaciones se crean por personas emprendedoras e independientes.